Las reservas internacionales son activos que se encuentran bajo el control del Banco Central, y de los cuales puede disponer —entre otros— para el financiamiento de la balanza de pagos o intervenir en el mercado cambiario.
Su composición es de una diversa gama de activos; en general pueden ser monedas, billetes, títulos valores, depósitos, metales preciosos, entre otros. Sin embargo, en Costa Rica están compuestas, principalmente, por títulos valores y depósitos en moneda extranjera como el dólar, por ejemplo.
Tal y como se adelantó al inicio, los activos de reserva tienen varias funciones. Dentro de ellas se pueden enumerar las siguientes:
- Intervenir en el mercado cambiario para suavizar fluctuaciones del tipo de cambio y evitar alteraciones excesivas en el precio de la moneda.
- Brindar liquidez en moneda extranjera para absorber perturbaciones en periodos de crisis o cuando el financiamiento externo es limitado.
- Garantizar que el país puede hacer frente a obligaciones externas, sea deuda del gobierno o bien importaciones del sector privado.
- Atender necesidades de liquidez de algunos sectores de la economía, por ejemplo, el bancario.
Comprender la función de las reservas internacionales permite a las personas evaluar, por medio de ellas, la estabilidad financiera de un país.