La gestión patrimonial consiste en tres etapas: generación, preservación y sucesión. Históricamente, los inversionistas hacían mayor énfasis en la etapa de generación, donde los clientes por medio de la asesoría bursátil o financiera apuntan a obtener rendimientos positivos sobre sus inversiones. En la actualidad, la segunda y tercera etapa de la gestión patrimonial han tomado relevancia al mismo nivel. Esto se debe a diversas razones tales como: reformas tributarias, acuerdos de intercambio de información financiera entre países, el COVID-19, movilidad, globalización, inseguridad, entre otras; las cuales pueden afectar de manera negativa el patrimonio generado a través del tiempo.
En ese entendido, los inversionistas requieren incorporar en su estrategia patrimonial soluciones o productos que fortalezcan la preservación y garanticen una sucesión ordenada y eficiente de su patrimonio. Un instrumento ideal es el Fideicomiso Testamentario.
¿Qué es y cómo funciona un Fideicomiso Testamentario?
Las partes involucradas en un contrato legal de carácter fiduciario son: Fideicomitente, Fiduciario y Fideicomisarios. Es un negocio jurídico, donde una persona física o jurídica (Fideicomitente), transfiere bienes o derechos de un patrimonio, para que sea administrado y custodiado por un Fiduciario, el cual, se compromete a llevar a cabo la ejecución de división de los bienes a los Fideicomisarios (beneficiarios), acorde con lo establecido en el contrato del Fideicomiso.
¿Cuáles son los beneficios de un Fideicomiso Testamentario?:
- Es un contrato mercantil, diseñado 100% a la medida.
- El patrimonio fideicomitido es autónomo; es decir, hay una separación total entre los bienes del Fiduciario y los del Fideicomitente.
- Los bienes de un Fideicomiso son inembargables.
- El Fideicomitente sigue teniendo control total sobre los activos en vida.
- Proceso sucesorio automático, lo que evita procesos mortuales.
- Es un proceso sucesorio ágil y privado.
- Tiene libre designación o sustitución de beneficiarios.
- Evita conflictos familiares de índole legal.
Un fideicomiso es una sólida alternativa de sucesión familiar, debido a que ofrece una serie de beneficios que permite proteger el patrimonio y realizar una transmisión mortis causa de forma ordenada y eficiente, incluso en situaciones familiares especiales. Este tipo de estructura patrimonial se debe elaborar a la medida de cada persona, su familia y alineado a sus objetivos patrimoniales. Es por esto por lo que resulta esencial que se analice cada caso particular con un equipo legal y patrimonial capacitado, el cual pueda estructurar en su totalidad los objetivos sucesorios del Fideicomitente.